08 Abr Qué necesito para vender online
Kit de supervivencia para seguir vendiendo online en tiempos de pandemia
En estos tiempos raros en los que muchos se ven obligados a cerrar un negocio tradicional por causas que antes parecían de ciencia ficción y la incertidumbre se apodera de nosotros… sabemos que más de uno se estará preguntando: «¿Por qué no habré montado yo un negocio online? No tendría que pagar alquiler, ni luz, y si hay una pandemia (está claro que todo puede pasar) no me veré obligado a cerrar el negocio por un tiempo indeterminado».
Para empezar, deberás saber que sí, que tener un e-commerce tiene múltiples ventajas, entre otras, efectivamente, no tener que pagar un alquiler del local. De la misma manera, también debemos informarte de que no todo es un camino de rosas. Un negocio online requiere tiempo, pasión y mucha creatividad. Piensa que nadie va a pasar por delante de la puerta de tu negocio por casualidad, sino que a partir de ahora tendrás que atraer a tu público hasta la tienda. ¿Cómo? Ahí está la ciencia.
En este post encontrarás unos cuantos consejos y ejemplos básicos de por dónde debes empezar. Si estás decidido a lanzar tu negocio online y no tienes tiempo o te da miedo hacerlo solo, en IDE Comunicación podemos acompañarte y guiarte en el camino, tenlo en cuenta.
1. Plataformas para desarrollar tu tienda online
WooCommerce
Es un plugin de WordPress y es gratuito (con posibilidad de añadir miles de plugins de pago). Es muy personalizable, puedes hacer casi cualquier cosa que te imagines.
PrestaShop
Una de las plataformas más completas y, al ser de código abierto, es totalmente gratuita.
Magento
Una opción de las más profesionales con infinitas formas de personalización y resultados realmente buenos. Quizás es también una de las que mayor requerimiento de programación necesita para obtener un resultado aceptable.
Shopify
La más sencilla e intuitiva. Tiene plantillas muy bonitas y todo lo imprescindible para vender tus productos sin complicarte la vida. Eso sí, no tendrás muchas posibilidades de personalizar tu web o ponerla tal cual a ti te gustaría, tendrás que amoldarte a la plantilla que elijas.
2. Cómo llevar tus redes sociales.
Utiliza un tono que te represente. A veces caemos en pensar que nuestros clientes son las personas más cultas e ilustradas del mundo, y no tiene por qué. Quizás lleguemos a impactarles más con un tono natural y cercano que con expresiones rebuscadas y frases relamidas.
Aporta valor añadido, no solo subas fotos de tus productos. Esto es muy importante, tus clientes no te siguen en las redes para que les digas una y otra vez que vendes los mejores productos del mundo, sino porque les regales algo más. Conseguirás un mayor beneficio cuando tus seguidores saben que en ti tienen una referencia del sector, alguien que sabe más que ellos y que les puede ayudar más allá de venderles un producto.
Sé constante, publica con frecuencia. Es importante no solo para que tus clientes no se olviden de ti, sino porque el propio sistema de la mayoría de redes sociales te penalizará por no ser un perfil que se alimenta habitualmente y dejarás de ser visible para el público.
No te obsesiones con el número de seguidores y comunícate más con ellos. Las redes sociales no son una competición de ver quién tiene más seguidores o más likes. Se trata de una herramienta muy poderosa de comunicación, con la que podrás llegar a millones de personas y contarles lo que haces y cómo lo haces.
3. Chats para hablar con tus clientes.
Drift
Es uno de los chats más profesionales. La versión gratuita tiene suficientes funciones para empezar.
Userlike
Te permite conectar tu nueva web con los chats de otras aplicaciones como Facebook.
Olark
Quizás la opción más sencilla y además es gratuita. Muy recomendable si no quieres complicarte la vida.
La aplicación te permite instalar un botón en tu web para que tus clientes se comuniquen contigo directamente en tu whatsapp.
4. Cómo hacer las fotos de tu tienda online
Aprovecha la luz natural de las primeras horas del día, es la luz más bonita. Conseguirás que no haya grandes sombras ni reflejos raros en tus productos.
Deja espacio de margen alrededor del producto. Es el protagonista, debes enmarcarlo y dejar aire a su alrededor para que luzca como se merece.
Evita los filtros y las sombras, naturalidad ante todo. Olvídate de luces y efectos de fotografía, un producto bien iluminado en un entorno neutro es la mejor imagen que puedes ofrecer a tus clientes.
Apaga el flash. Es preferible que esperes a tener la luz ideal, el flash de las cámaras convencionales no tiene la calidad suficiente para realizar una fotografía de producto. Y se nota.
Con esto tienes suficiente para empezar, ahora solo necesitas dedicarle tiempo y esfuerzo. Echándole ganas y cariño, seguro que pronto empezarás a rentabilizar tu nueva tienda online.
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